Año de lanzamiento del estándar IEEE 802.11ad (WiGig)
El desarrollo de los estándares Wi-Fi ha sido clave para la evolución de las comunicaciones inalámbricas, proporcionando mayor velocidad, estabilidad y alcance con cada nueva versión. Entre esos hitos se encuentra el estándar IEEE 802.11ad, conocido popularmente como WiGig, que representa un salto tecnológico hacia las altas frecuencias y la transmisión ultrarrápida de datos a corta distancia.
El estándar IEEE 802.11ad fue oficialmente aprobado en diciembre de 2012 por el IEEE (Institute of Electrical and Electronics Engineers). Este avance permitió a los dispositivos aprovechar la banda de 60 GHz, una frecuencia que ofrece velocidades teóricas de hasta 7 Gbps, superando ampliamente las versiones anteriores de Wi-Fi que operaban en las bandas de 2.4 y 5 GHz.
El inicio de WiGig marcó una nueva era para las conexiones inalámbricas en entornos domésticos y empresariales. Su propósito principal no era reemplazar las bandas tradicionales, sino complementarlas, proporcionando un canal ultra veloz para la transferencia de grandes volúmenes de datos en espacios reducidos, ideal para transmisión de video en 4K, realidad virtual o conexiones entre pantallas y estaciones de trabajo sin cables.
Ejemplos reales y beneficios prácticos del WiGig 802.11ad
El WiGig 802.11ad pronto encontró aplicación en múltiples sectores tecnológicos. Por ejemplo, Dell y HP integraron esta tecnología en sus portátiles y estaciones de acoplamiento inalámbricas, permitiendo que una computadora se conectara instantáneamente a monitores y periféricos sin cables. Asimismo, Qualcomm desarrolló chipsets compatibles con WiGig, incorporados en smartphones capaces de transmitir video de alta resolución directamente a televisores inteligentes.
Entre sus beneficios más notables se encuentran:
- Velocidades ultrarrápidas: hasta 7 Gbps en condiciones óptimas.
- Latencia mínima: esencial para aplicaciones de realidad virtual y aumentada.
- Alta eficiencia en espacios cortos: ideal para entornos de oficina o salas de conferencia.
Un caso destacable fue el del WiGig Alliance Testbed, donde se realizaron pruebas en entornos urbanos simulados, demostrando que el 802.11ad podía reducir los tiempos de transferencia de archivos pesados hasta un 85% en comparación con Wi‑Fi 5. En sitios como IEEE Xplore Digital Library se pueden consultar artículos técnicos y resultados experimentales sobre su implementación y evolución hacia WiGig 2 (802.11ay).

El estándar IEEE 802.11ad (WiGig), lanzado oficialmente en 2012, marcó un punto de inflexión al demostrar las capacidades del espectro de 60 GHz. Aunque su uso está limitado por el alcance, su impacto en el desarrollo de tecnologías posteriores como 802.11ay ha sido incalculable.
Al reflexionar sobre nuestras necesidades tecnológicas, vale la pena preguntarse: ¿qué importancia le damos a la velocidad frente a la cobertura? Para entornos donde la velocidad y la latencia tienen prioridad —como oficinas creativas, diseño 3D o entretenimiento doméstico—, WiGig representa una ventana al futuro del internet inalámbrico. La evolución de este estándar nos recuerda que el progreso tecnológico no solo está en la distancia que recorremos, sino también en la rapidez y eficiencia con la que conectamos nuestras ideas.
Discover more from Archer IT Solutons
Subscribe to get the latest posts sent to your email.

No responses yet